Tras el encuentro en Olivos, ambos mandatarios informaron que la Comisión Administradora del Río Uruguay vigilará la pastera. "Vamos a respetar reglas porque en el fondo es lo que más nos conviene", afirmó Mujica. Ninguno habló del corte en Gualeguaychú.
En un salón de la quinta de Olivos, Cristina Fernández de Kirchner y José Mujica se encontraron para reencauzar la relación entre Argentina y Uruguay tras el fallo salomónico de la Corte Internacional de La Haya sobre la pastera Botnia. Acordaron acatar reglas claras, pero no dijeron ni una palabra del conflictivo tema del corte en Gualeguaychu.
Tras la reunión, ambos dieron una conferencia de prensa donde anunciaron que respetarán la decisión del máximo tribunal internacional y las reglas establecidas. También acordaron que la Comisión Administradora del Río Uruguay (Caru se ocupe de "vigilar" la tarea de Botnia y "el impacto que pueda tener" en ese curso de agua el funcionamiento de la planta instalada en Fray Bentos.
"Los hombres aprendemos mucho mas del dolor que de la bonanza. Vamos a respetar el fallo de La Haya lleno de voluntad política que es hija de la experiencia, del dolor vivido, de lo que nos ha costado estos siete años", dijo Mujica. Y agregó: "Ni la presidenta ni yo somos Mandrake, nos sale mucho mas barato tener reglas de juego bien claritas".
Cristina, por su parte, sostuvo que la reunión "reafirma la vocación política de acatamiento del fallo de la Corte de La Haya que era la jurisdicción que establecía el propio Tratado. Esta voluntad política de ambos presidentes y ambos países de acatar el fallo no tiene una visión estrictamente legalista".
Sostuvo que en el marco del "reencauzamiento de las relaciones bilaterales", la próxima reunión de ambos mandatarios se realizará "en Anchorena", Uruguay, y será "para hablar de otros temas de la relación bilateral" como "países amigos".
Ninguno hizo referencia al corte del puente internacional en Gualeguaychú por parte de los asambleístas, tema que el gobierno uruguayo había establecido como "prioritario".
Tampoco se refirieron al supuesto pedido de perdón que tendría que haber hecho Mujica. Esta posibilidad había sido sugerida por el Ejecutivo argentino en forma previa al encuentro. Entes de ingresar se le preguntó al mandatario uruguayo sobre el tema. A lo que respondió con ironía: ""Perdón piden los novios".
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